miércoles, 29 de junio de 2011

PRIMERA B NACIONAL
Quilmes





El dueño de la ilusión
Ricardo Caruso Lombardi se reunió con Aníbal Fernández, delineó una serie de detalles y asentó la continuidad. Pidió retener la base del plantel y cinco refuerzos de categoría buscando el regreso a la elite.

Había una trama abierta. Los días se alargaron dejando una estela de incertidumbre desperdigada por Quilmes. Algunos protagonistas inesperados fueron incluidos en esta historia y el alrededor multiplicó las incógnitas. El cónclave pactado entre Ricardo Caruso Lombardi (foto) y Aníbal Fernández planteaba un escenario adusto aunque el transcurso de la horas arrimó una manta de calma. El último paso marcado en las fojas del itinerario para encaminar el proyecto deportivo. Y la proclama trajo el esperado destello de claridad.
“Me siento muy bien y estoy cómodo en el club. Es cierto que había que charlar algunos detalles, pero no hubo problemas en llegar al acuerdo”, expuso el director técnico. La idea exhibida en un principio era proseguir en Primera División. Sin embargo, levantó el pulgar y seguirá en el cargo, tal como asentó hasta junio de 2012. No fue un tema tan sencillo, pese a que la unión de caracteres tardó poco en aparecer.
Uno de los requisitos esenciales es la retención de la columna del equipo. Varios nombres figuran en la lista. Pablo Garnier, Miguel Caneo, Martín Cauteruccio, Pablo Vázquez, Sebastián Martínez, Pablo Vázquez están anotados. A estos se agregan Francisco Cerro, el caso más complicado ante las diversas ofertas. La campaña por refuerzos también entra en el ruedo y serían cinco, al menos, para conformar el plantel. Serán ítems a resolver a la brevedad. Claro, la batuta sigue teniendo el mismo dueño.

Foto gentileza Fotobaires
Publicado por Hernán Gabriel Dufau

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