El barrio es mío
El corajudo Estudiantes de Buenos Aires dio cátedra de astucia en José Ingenieros. Bajó a Almagro con un player menos sobre el final, se llevó el clásico y quedó a nueve de Atlanta.
Esta era la manera. Creyendo que la primera pelota era la última del partido. Irguiendo el espíritu inquebrantable. Teniendo la mente fría y el corazón palpitando sin cesar. Sosteniendo la firme convicción de tocar el éxito con ambas manos después de 90’ de éxtasis puro. Yendo al frente desde el primer momento. Los partidos siempre los ganan esos once jugadores que entran al campo de juego. Y una vez más, hay un ejemplo para encuadrar. Estudiantes de Buenos Aires interpretó a la perfección la tarea a realizar, más allá de pasar un lapso de letargo en el primer tiempo. Y por eso triunfó y ganó mucho más que tres puntos. Vistió de felicidad las calles del barrio abrazado a un momento que ya está guardado en la historia grande.
Ante dibujos disímiles, la diferencia estuvo en el fragor del mediocampo. Soria y Giménez apretaron como nunca siendo los ejes del motor creado por Pasini. La estrategia partió de la movilidad y el frenesí hecho coraje sobre un sector fundamental. Convirtió la noche en su gran día cuando Solchaga mostró cero egoísmos para que Cipriani tire el pase a la alegría. Ventaja en mano cayó dentro en el relax. Bajó la atención un par de minutos y Almagro empardó la cuestión sin mediar avisos. Llegó al fondo y provocó el desahogo tras sentir el impacto, renovando el ambiente con el alarido. Pareció una reacción anímica que futbolística, más allá arrendar el dominio parcial.
El descanso estiró la incertidumbre mutando las sensaciones. Tan simple como eso. La visita entendió cómo enaltecer el 4-4-2 más allá del esquema. El ingreso de Martínez no sólo tapó el sector derecho que el anfitrión más utilizó, sino que además despegó un inconveniente visible. Sin embargo, la expulsión de Giménez, propia del cansancio natural, tiró otro ingrediente al desenlace. El nerviosismo ganó sentidos pero jamás aplacó el deseo. Yassogna peleó en las alturas y Cipriani recibió la cesión y definió con majestuosa sutileza. Abrazó la victoria, los tres puntos y el desenfrenado festejo. Es que Estudiantes de Buenos Aires hizo la heroica encima de la recta final y cantó victoria en el derby barrial. Caseros ríe y late.
FORMACIONES
Almagro (1): 1.Diego Pave; 4.Huberto Vega, 2.Matías Palavecino, 6.Hernán Pérez; 3.Adrián Iglesias, 7.Germán Libramento, 5.Martín Madrid, 11.Brahaman Sinisterra; 10.Diego Figueroa; 8.Claudio Acosta y 9.Emiliano Bonfigli.
DT: Alejandro Julián Méndez.
Suplentes: Matías Coloca, Esteban Giambuzzi, Mauricio Suigo y Fabián Santa Cruz.
Cambios: 9’ST Nahuel Iribarren x Germán Libramento
31’ST Juan Pablo Gómez x Brahaman Sinisterra
43’ST Sergio Karsburg x Humberto Vega
Estudiantes de Buenos Aires (2): 1.Martín Ríos; 4.Daniel Gojmerac, 2.Sebastián Gabriel Ferreira, 6.Nicolás Gásperi, 3.Facundo Felipe Bazán; 8.Facundo Pansardi, 5.Luis Soria, 7.Emanuel Giménez, 10.Cristian Bustos; 11.Pablo Solaga y 9.Luciano Cipriani.
Suplentes: Julio César Salvá, Federico Gásperi, Matías Carrizo y Patricio Isla Casares.
Cambios: ET Diego Martínez x Nahuel Pansardi
22’ST Cristian Yassogna x Pablo Solchaga
41’ST Juan Peloso x Luciano Cipriani
Goles: 6’PT Luciano Cipriani (E), 10’PT Emiliano Bonfigli (A) y 39’ST Luciano Cipriani (E).
Amonestados: 9’PT Sebastián Ferreira (E), 18’PT Emanuel Giménez (E), 42’PT Luciano Cipriani (E), 19’ST Diego Martínez (E) y 34’ST Claudio Acosta (A).
Expulsados: 26’ST Emanuel Giménez (E).
Incidencias: No hubo.
La figura: Luciano Cipriani (E).
Árbitro: Eduardo Gutiérrez (Regular).
Asistentes: Andrés Prendel - Pablo Salvador.
Público: 7.000 espectadores aproximadamente.
Estadio: Tres de Febrero.
Campo de juego: Bueno.
Hora de comienzo: 21:06 horas.
LAS FRASES
Pocos sonidos pudieron escucharse. El enfado del hincha caló en sala de conferencia. La cabizbaja salida de los jugadores apenas acentuó un manojo de palabras. El exacerbado ánimo en la calle chocó con los rostros shockeados por la derrota y las palabras apenas asomaron aunque sin dejar marcas concisas.
Hubo varios destellos de algarabía total. El ego del hincha llegó a tocar el cielo y cayó de golpe. Estiró el festejó hasta pasada la medianoche entre el canto popular y el multiplicado agradecimiento. Y Luciano Cipriani, el hombre de la noche, recibió sonriente esa caricia y tiró varios halagos. “Es muy lindo poder tener este tipo de alegrías y ver a la gente contenta por el esfuerzo que se hizo. El equipo se brindó por completó y jugó un gran encuentro para llegar a este final tan esperado”, le reflejó a Locos x el Ascenso. Posó el análisis en una reflexión sumamente clara sobre el clásico abrochando con un clip una sensación repartida. “Estos partidos deben jugarse de esta manera. Demostramos tener las cosas claras, eso ayudó a estar tranquilos y pegar en los momentos justos”, dijo el delantero, autor de los dos goles. Y agregó abriendo una puerta al futuro: “Todavía tenemos un largo camino por recorrer y vamos a dar pelea hasta el final”.
Foto gentileza Damián Grundwald
Publicado por Dante Ariel Dufau
El corajudo Estudiantes de Buenos Aires dio cátedra de astucia en José Ingenieros. Bajó a Almagro con un player menos sobre el final, se llevó el clásico y quedó a nueve de Atlanta.
Esta era la manera. Creyendo que la primera pelota era la última del partido. Irguiendo el espíritu inquebrantable. Teniendo la mente fría y el corazón palpitando sin cesar. Sosteniendo la firme convicción de tocar el éxito con ambas manos después de 90’ de éxtasis puro. Yendo al frente desde el primer momento. Los partidos siempre los ganan esos once jugadores que entran al campo de juego. Y una vez más, hay un ejemplo para encuadrar. Estudiantes de Buenos Aires interpretó a la perfección la tarea a realizar, más allá de pasar un lapso de letargo en el primer tiempo. Y por eso triunfó y ganó mucho más que tres puntos. Vistió de felicidad las calles del barrio abrazado a un momento que ya está guardado en la historia grande.
Ante dibujos disímiles, la diferencia estuvo en el fragor del mediocampo. Soria y Giménez apretaron como nunca siendo los ejes del motor creado por Pasini. La estrategia partió de la movilidad y el frenesí hecho coraje sobre un sector fundamental. Convirtió la noche en su gran día cuando Solchaga mostró cero egoísmos para que Cipriani tire el pase a la alegría. Ventaja en mano cayó dentro en el relax. Bajó la atención un par de minutos y Almagro empardó la cuestión sin mediar avisos. Llegó al fondo y provocó el desahogo tras sentir el impacto, renovando el ambiente con el alarido. Pareció una reacción anímica que futbolística, más allá arrendar el dominio parcial.
El descanso estiró la incertidumbre mutando las sensaciones. Tan simple como eso. La visita entendió cómo enaltecer el 4-4-2 más allá del esquema. El ingreso de Martínez no sólo tapó el sector derecho que el anfitrión más utilizó, sino que además despegó un inconveniente visible. Sin embargo, la expulsión de Giménez, propia del cansancio natural, tiró otro ingrediente al desenlace. El nerviosismo ganó sentidos pero jamás aplacó el deseo. Yassogna peleó en las alturas y Cipriani recibió la cesión y definió con majestuosa sutileza. Abrazó la victoria, los tres puntos y el desenfrenado festejo. Es que Estudiantes de Buenos Aires hizo la heroica encima de la recta final y cantó victoria en el derby barrial. Caseros ríe y late.
FORMACIONES
Almagro (1): 1.Diego Pave; 4.Huberto Vega, 2.Matías Palavecino, 6.Hernán Pérez; 3.Adrián Iglesias, 7.Germán Libramento, 5.Martín Madrid, 11.Brahaman Sinisterra; 10.Diego Figueroa; 8.Claudio Acosta y 9.Emiliano Bonfigli.
DT: Alejandro Julián Méndez.
Suplentes: Matías Coloca, Esteban Giambuzzi, Mauricio Suigo y Fabián Santa Cruz.
Cambios: 9’ST Nahuel Iribarren x Germán Libramento
31’ST Juan Pablo Gómez x Brahaman Sinisterra
43’ST Sergio Karsburg x Humberto Vega
Estudiantes de Buenos Aires (2): 1.Martín Ríos; 4.Daniel Gojmerac, 2.Sebastián Gabriel Ferreira, 6.Nicolás Gásperi, 3.Facundo Felipe Bazán; 8.Facundo Pansardi, 5.Luis Soria, 7.Emanuel Giménez, 10.Cristian Bustos; 11.Pablo Solaga y 9.Luciano Cipriani.
Suplentes: Julio César Salvá, Federico Gásperi, Matías Carrizo y Patricio Isla Casares.
Cambios: ET Diego Martínez x Nahuel Pansardi
22’ST Cristian Yassogna x Pablo Solchaga
41’ST Juan Peloso x Luciano Cipriani
Goles: 6’PT Luciano Cipriani (E), 10’PT Emiliano Bonfigli (A) y 39’ST Luciano Cipriani (E).
Amonestados: 9’PT Sebastián Ferreira (E), 18’PT Emanuel Giménez (E), 42’PT Luciano Cipriani (E), 19’ST Diego Martínez (E) y 34’ST Claudio Acosta (A).
Expulsados: 26’ST Emanuel Giménez (E).
Incidencias: No hubo.
La figura: Luciano Cipriani (E).
Árbitro: Eduardo Gutiérrez (Regular).
Asistentes: Andrés Prendel - Pablo Salvador.
Público: 7.000 espectadores aproximadamente.
Estadio: Tres de Febrero.
Campo de juego: Bueno.
Hora de comienzo: 21:06 horas.
LAS FRASES
Pocos sonidos pudieron escucharse. El enfado del hincha caló en sala de conferencia. La cabizbaja salida de los jugadores apenas acentuó un manojo de palabras. El exacerbado ánimo en la calle chocó con los rostros shockeados por la derrota y las palabras apenas asomaron aunque sin dejar marcas concisas.
Hubo varios destellos de algarabía total. El ego del hincha llegó a tocar el cielo y cayó de golpe. Estiró el festejó hasta pasada la medianoche entre el canto popular y el multiplicado agradecimiento. Y Luciano Cipriani, el hombre de la noche, recibió sonriente esa caricia y tiró varios halagos. “Es muy lindo poder tener este tipo de alegrías y ver a la gente contenta por el esfuerzo que se hizo. El equipo se brindó por completó y jugó un gran encuentro para llegar a este final tan esperado”, le reflejó a Locos x el Ascenso. Posó el análisis en una reflexión sumamente clara sobre el clásico abrochando con un clip una sensación repartida. “Estos partidos deben jugarse de esta manera. Demostramos tener las cosas claras, eso ayudó a estar tranquilos y pegar en los momentos justos”, dijo el delantero, autor de los dos goles. Y agregó abriendo una puerta al futuro: “Todavía tenemos un largo camino por recorrer y vamos a dar pelea hasta el final”.
Foto gentileza Damián Grundwald
Publicado por Dante Ariel Dufau
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