PRIMERA B METROPOLITANA
General Lamadrid
Enlace de sangre
Los hermanos Mannara, Pablo y Rodrigo, llegaron a Devoto. En la reunión con la dirigencia, ultimaron detalles y pusieron el gancho en el vínculo.
Es la ley primera. Siempre debe ser respetada. Está tatuada en la piel, sino los devoran los de afuera. Ese pensamiento fue utilizado por los directivos durante la última semana de acciones para completar el plantel. Y el logro tuvo un duplicado. Pablo y Rodrigo Mannara cerraron el acuerdo contractual y se transformaron en las flamantes adquisiciones. De hecho, los últimos players en sumarse para esta exigente temporada.
Sólo faltaba el trámite final. Y todo se dio tal esperaban. La llegada de los hermanos terminó asentada en el cónclave, tras el breve impasse en la negociación. Parecía que las puertas estaban cerradas pero, al final, agregó dos nombres más al listado.
Publicado por Dante Ariel Dufau
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