jueves, 4 de agosto de 2011

PRIMERA B NACIONAL
Rosario Central
 



Rápido y feliz
Paulo Ferrari destrabó la salida de River Plate, pese al deseo de continuar y apenas llegó a Rosario, firmó los papeles y se integró al plantel. “Estoy muy contento por esta posibilidad”, aseguró.

El ambiente de alta tensión en el que se vivió la definición del caso no fue mera casualidad. Varios días de incertidumbre, tironeos y conversaciones acumuladas no podían tener un desenlace negativo. Y al final, Paulo Ferrari (foto), un hijo pródigo de la institución, encaminó ese viaje de regreso. Paciencia absoluta para cumplir con una ambición personal llevada sobre la piel. Capítulos complicados y repletos de marcas hasta llegar al dulce momento del reencuentro.
La vibración del destino es indescifrable, apegando consecuencias lógicas. El golpe del descenso sacudió a River Plate en la fatídica Promoción, ante Belgrano de Córdoba. En cambio, el lateral - volante derecho había dejado entreabierta la alternativa de renovar el vínculo pero las diferencias de caracteres cerraron la pequeña rendija. Y a la par, la cúpula dirigencial allanó el camino hacia el retorno.
“Estoy muy contento por esta posibilidad de volver al club. Ahora, hay que pensar en poder cumplir cada objetivo”, aseguró. Otra caricia que rozó a Juan Antonio Pizzi antes del arranque de la acción. La estampa del vínculo por tres años cerró la novela. Y estiró la enorme felicidad desperdigada en la ciudad.

Publicado por Corresponsal (Rosario)

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