PRIMERA B METROPOLITANA
Estudiantes de Buenos Aires
Estudiantes de Buenos Aires
Nota a Alejandro Noriega
“A veces lo ayudan”
Alejandro Noriega optimista “por los resultados que se nos vienen dando” charló con Locos x el Ascenso y pensando en Deportivo Armenio, chicanéo: “Es difícil ir a jugar a una cancha donde hay poca gente”.
La temporada pasada tuvo su esplendor en la ofensiva. El gran último semestre de Juan Martín fue determinante para provocar la levantada. No alcanzó para lograr entrar en el reducido. Pero, mirado con atención, los 28 goles lo llevaron al ascenso personal. Alejandro Noriega, cómodo con la nueve, quiere imitarlo: “Es una gran marca la que consiguió y espero poderla alcanzar”. Sabiendo de las responsabilidades “uno se pone contento cuando convierte” aunque, en los momentos complicados “hay luchar e ir a cada pelota como si fuera la última porque es de la única manera que nos quede una situación es peleando hasta el final”, dijo. En el mejor de Estudiantes de Buenos Aires, luego del cabizbajo comienzo, asumió que “no podemos relajarnos, es una historia larga y todavía hay mucho por lograr”. Como si estuviera dentro del área, a punto de definir, el delantero posó el pensamiento en el encuentro del sábado: “Deportivo Armenio es un equipo que en su cancha que se hace muy duro, a veces lo ayudan y la mayoría de las oportunidades, los partidos se hacen muy aburridos de ver”. Las dimensiones reducidas influirán, o no, en el trato de la globa. El mediocampo “será una zona clave” y, sin desesperarse, “mantener nuestro patrón de juego”, aclaró. El permanente pelotazo se acapara del libreto. Pero, también tiró: “Es difícil ir a jugar a una cancha donde hay poca gente y buscando asentarnos, tenemos que estar fuertes de la cabeza como si fuéramos a enfrentar al más grande de la categoría y cerrando el año”. Ansioso y a la espera de codearse con el gol, reconoce que “por mis características de atacante grandote y torpe, la tranquilidad es un aspecto del que tenemos que estar muy bien”. El fin de semana libre, en la cuarta fecha, lo revivió. Aire nuevo que refrescó ideas. Para luego, inmerso en una racha dulce, meterse entre los de arriba.
Publicado por Dante Ariel Dufau
Alejandro Noriega optimista “por los resultados que se nos vienen dando” charló con Locos x el Ascenso y pensando en Deportivo Armenio, chicanéo: “Es difícil ir a jugar a una cancha donde hay poca gente”.
La temporada pasada tuvo su esplendor en la ofensiva. El gran último semestre de Juan Martín fue determinante para provocar la levantada. No alcanzó para lograr entrar en el reducido. Pero, mirado con atención, los 28 goles lo llevaron al ascenso personal. Alejandro Noriega, cómodo con la nueve, quiere imitarlo: “Es una gran marca la que consiguió y espero poderla alcanzar”. Sabiendo de las responsabilidades “uno se pone contento cuando convierte” aunque, en los momentos complicados “hay luchar e ir a cada pelota como si fuera la última porque es de la única manera que nos quede una situación es peleando hasta el final”, dijo. En el mejor de Estudiantes de Buenos Aires, luego del cabizbajo comienzo, asumió que “no podemos relajarnos, es una historia larga y todavía hay mucho por lograr”. Como si estuviera dentro del área, a punto de definir, el delantero posó el pensamiento en el encuentro del sábado: “Deportivo Armenio es un equipo que en su cancha que se hace muy duro, a veces lo ayudan y la mayoría de las oportunidades, los partidos se hacen muy aburridos de ver”. Las dimensiones reducidas influirán, o no, en el trato de la globa. El mediocampo “será una zona clave” y, sin desesperarse, “mantener nuestro patrón de juego”, aclaró. El permanente pelotazo se acapara del libreto. Pero, también tiró: “Es difícil ir a jugar a una cancha donde hay poca gente y buscando asentarnos, tenemos que estar fuertes de la cabeza como si fuéramos a enfrentar al más grande de la categoría y cerrando el año”. Ansioso y a la espera de codearse con el gol, reconoce que “por mis características de atacante grandote y torpe, la tranquilidad es un aspecto del que tenemos que estar muy bien”. El fin de semana libre, en la cuarta fecha, lo revivió. Aire nuevo que refrescó ideas. Para luego, inmerso en una racha dulce, meterse entre los de arriba.Publicado por Dante Ariel Dufau
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