Quilmes 2 1 Mitre
Cerveza casera
Quilmes venció 2-1 a Mitre en el Centenario, rompió la racha sin victorias y, de pasó, escaló al cuarto puesto de la Zona A.
Astucia, vigilo, inteligencia y eficacia. Quilmes se desenvolvió en la cancha como un cazador implacable. Atacó con voracidad cada vez que olió el aroma de la sangre. Así mordió temprano y se comió a un Mitre que pareció una presa sencilla. Y logró un triunfo vital para ubicarse en la cercanía de la cumbre de la Zona A.
El Cervecero es un equipo más pragmático que pretencioso. No se desvela por manejar la pelota. No exhibe pruritos. En algunos instantes lo aborda el temor al qué dirán. Tiene zozobras. Carga, como tantos, con la mochila del pasado. Funciona cada vez que pisa el acelerador. Transpira cuando lo presionan alto. Y padece los momentos álgidos, tal puede dar cuenta el oscuro epílogo de la tarde.
Mitre se tornó peligroso cuando ataca. Se trata de un team que tiene una idea firme, maneja la globa con criterio y es paciente para abrir huecos mediante la circulación y la profundidad, aunque queda en evidencia que le falta cambio de ritmo y claridad para sacarle rédito a tanta tenencia. El déficit se explica, en gran parte, en los errores defensivos que comete en tramos cruciales.
Quilmes terminó muy atrás. Y mientras más se replegó, más sufrió el final a través del empuje de un Mitre envalentonado. El tiempo ya se encargará de determinar cuál es la calidad de la cerveza.
Foto Prensa Mitre
Publicado por Dante Ariel Dufau
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