Locos x el Ascenso

PRIMERA B METROPOLITANA
Deportivo Morón


Una realidad distinta
El DT José Vicente Stagliano mira un paisaje cambiado al que meses atrás veía, piensa en más y no se achica a tener que galopar de atrás. “Estamos muy bien y ganando en confianza”, le dijo a Locos x el Ascenso.

Cuantas dudas puede tener tras un arranque perfecto. Pocas. Ninguna. O una que está casi despejada. Por fin se le dieron los resultados que esperaba tener. Es que tan grande fue el deseo y las ganas que al final el reconocimiento llegó. Tardío pero en el momento de mayor necesidad. Un arranque de año que José Vicente Stagliano aguardó durante las acotadas vacaciones y la pretemporada. “La verdad es que necesitábamos tener estos resultados que nos dieran la pauta que las cosas las estábamos haciendo muy bien. Sabíamos interiormente el esfuerzos que se hizo en cada trabajo pero teníamos que plasmarlo en estos dos primeros partidos del año y por suerte se logró mostrar la imagen que pretendíamos”, le comentó a Locos x el Ascenso, saboreando con cierta calma las dos victorias conseguidas. Y aclaró pensando en el match de hoy ante Flandria y en el futuro inmediato: “No podamos quedarnos con los hecho en estos encuentros, si lo haríamos estamos equivocados. Hay que sacar lo mejor para seguir por este camino y sumando especialmente como local y yendo al frente cuando somos visitante con el propósito de estar en la pelea”. Justamente para esta noche el único interrogante pasa por si Ezequiel Zelaya, que padece un fuerte golpe en la rodilla derecha, podrá ser de la partida. El movimiento en estos días fue creciendo en intensidad pero su presencia no fue confirmada. De no llegar apto, Nahuel Chacón irá desde el arranque. Lo cierto es que Guillermo Báez, que cumplió con la fecha de suspensión, volverá a la titularidad en reemplazo de Sebastián Lamacchia. Los once: Alejandro Migliardi; Julián Cano, Cristian González, Guillermo Báez, David Reano; Marcelo Vega, Hernán Bruno, Ramiro López; Ezequiel Zelaya o Nahuel Chacón; Carlos Alberto Lovera y Lucio Ceresetto.

Publicado por Hernán Gabriel Dufau